La bronquiolitis es una infección respiratoria aguda que ocurre con mayor frecuencia en los meses de otoño-invierno y afecta sobre todo a los menores de un año. Cuáles son los síntomas y qué pasa con el tratamiento.
¡Bronquiolitis! Una enfermedad que llega con el frío y complica la salud de los chicos
Las bajas temperaturas que llegan en esta época del año hace que algunas enfermedades respiratorias aparezcan y compliquen los cuadros, sobre todo en el caso de los niños. Una de ellas merece ser tenida en cuenta y tratada a tiempo: es la bronquiolitis.
El riesgo de enfermar en esta época del año aumenta por diferentes motivos, uno es que las defensas naturales del cuerpo bajan y, por otro lado, ciertos virus, como el de la gripe, resisten al frío y pueden trasladarse con mayor facilidad de una persona a otra.
¿Cómo son los síntomas?
La bronquiolitis es una infección respiratoria aguda que ocurre con mayor frecuencia en los meses de otoño-invierno y afecta sobre todo a los menores de 1 año. Puede ser causada por distintos virus; pero el más común es el Virus Sincicial Respiratorio (VSR).
Los síntomas iniciales de esta afección son catarro, congestión nasal, tos y fiebre leve que puede no estar presente. Cuando el virus avanza, se pueden comprometer las vías aéreas más pequeñas, generando la inflamación de los bronquiolos y provocando distintos grados de dificultad respiratoria.
¿Cuáles son los grupos de riesgo?
Un punto importante es que hay que acudir al médico de urgencia, si se observa respiración rápida, aleteo de la nariz, hundimiento entre las costillas al respirar, quejido respiratorio, rechazo a la alimentación o presencia de color azulado en la piel, uñas o labios, entre otros factores.
Asimismo, existen grupos de mayor riesgo, entre ellos los niños menores de 3 meses, recién nacidos prematuros y aquellos que tienen problemas crónicos de salud, como cardiopatía y enfermedades pulmonares crónicas o autoinmunes.
¿Cómo se la diagnostica?
El diagnóstico es fundamentalmente clínico, basado en la anamnesis y en la exploración física, por lo cual se debe realizar una exploración completa por aparatos, prestando especial atención al estado de hidratación y a los signos de dificultad respiratoria que presente una persona ante la consulta al profesional de la salud.
En el caso de la auscultación pulmonar predomina la espiración alargada, sibilancias, subcrepitantes e incluso zonas de hipoventilación. Las pruebas complementarias no suelen ser necesarias, salvo en situaciones muy concretas.
Tratamientos en los menores de edad
No existe un tratamiento específico para este tipo de virus, por lo que la buena evolución de los pacientes dependerá del mantenimiento de una adecuada oxigenación y de las medidas de apoyo respiratorio que se adopten, como por ejemplo la suplementación de oxígeno mediante cánulas, mascarillas u otros métodos, según indicación médica.
En cuanto a los tratamientos que pueden aplicarse en la situación de los menores, en la mayoría de ellos, la bronquiolitis es una enfermedad autolimitada y puede ser manejada en la casa del paciente.
Sin embargo, para niños con factores de riesgo considerables o severos, incluyendo enfermedades concomitantes o preexistentes, bajo peso, prematuridad o desnutrición, entre otros, el manejo de la infección debe ser supervisado por un entorno médico.
Además, el tratamiento de esta enfermedad se ha modificado poco a lo largo de los años, no existen tratamientos cuya efectividad se haya demostrado y, por lo tanto, en muchos casos, la efectividad de la estrategia terapéutica empleada carece de evidencias concluyentes.