Distintos especialistas dieron charlas, evacuaron y aclararon dudas.
Actividades por la Semana de la lactancia materna
Durante toda la semana pasada, se desarrolló en el distrito la Semana de la Lactancia Materna, dando charlas, evacuando consultas, y sobre todo derribando mitos populares y aclarando dudas.
Como se suele decir, los bebés no vienen con un manual bajo el brazo, por lo que estas campañas y actividades sirven para acompañar a madre e hijo en el ejercicio de una actividad cuyas consecuencias son todas más que positivas.
Sobre lo desarrollado en la semana, se refirieron varios profesionales al respecto, como Claudio Rocoma, Director de Salud: “Estas son las llamadas Acciones Promocionales de Salud que desarrolla el Ministerio. Cada área, en el caso de la lactancia materna, desarrolla un proyecto y se une a las demás para llevarlo a la práctica”.
“Sabemos que los niveles de lactancia materna son bajos. Hay una extraña cuestión cultural por la cual la mamá que no amamantó suele influenciar a la hija para que tampoco lo haga. Hay muchos mitos al respecto, por eso estamos insistiendo en estas campañas. Tuve un profesor que decía ‘la leche de vaca es excelente… para los terneros, así como la leche materna es excelente para los bebés”. No nos olvidemos además que la leche de vaca que se comercializa se prepara con agua. O sea, no hay nada mejor que la leche que les da la mamá: es saludable, transmite anticuerpos, no está contaminada, y también es importante para la economía doméstica”.
“Las chicas han hecho material de información muy importante, que derriba prejuicios y alienta a una conducta natural y sana”.
“Muchas veces la lactancia falla porque no se logra un buen ‘agarre’ del bebé a la teta, y es uno de los factores en que se insiste desde estas campañas”.
“En cuanto a lo estético, no está comprobado que la lactancia influya en la caída de los pechos. Y sí, se puede amamantar con prótesis mamarias puestas. Insisto, es un primer vínculo entre madre e hijo que genera un apego que durará toda la vida. Se ha probado que un apego inseguro produce a la larga trastornos de inseguridad, de ansiedad y muchos otros problemas”.
También expresó su opinión, Silvana Fagundez, Pediatra del Hospital Municipal: “Lo que nosotros generamos acá, es la insistencia en que la lactancia sea exclusiva hasta los seis meses, y brindamos a cada bebé un control personalizado por semana a cada bebé para que la mamá pueda percibir las mejoras que trae aparejada”.
“A veces no se ve diferencia en el peso entre un bebé amamantado y uno que recibe fórmula. Pero sabemos que a largo plazo la lactancia es sumamente favorable porque no solamente protege al chico de enfermedades, sino que establece un vínculo especial con la madre”.
“Hay estudios concluyentes acerca de que los niños amamantados logran un mayor coeficiente intelectual que aquellos que fueron alimentados a fórmula. Hay un contacto estrecho entre ambos, y la succión del bebé hace que la mamá genere hormonas que favorecen la producción de leche”.
“Nuestra tarea es darle tranquilidad a la mamá, que tiene millones de dudas. A veces está rodeada de mitos que aportan tías, abuelas, madres, vecinas. Nosotras desde acá les pedimos que cada consulta la hagan antes de interrumpir la lactancia, porque después es mucho más difícil reanudarla. Sepan que estamos para ayudarlas, que acudan a nosotras”.
“En cuanto al tiempo en que se dé la teta, se debe continuar mientras la mamá quiera, hasta dos años es lo aconsejado, pero la realidad es hacerla a libre demanda, relajando de a poco el vínculo que se va acomodando”.
Por último, las obstetras Patricia Chiapani y Alejandra Cresimati, dieron su parecer: “En cuanto al mito de que, si están amamantando, las mamás no quedan embarazadas, te aclaro que es verdadero a medias, hay un porcentaje que sí queda, por lo que siempre recomendamos que asocien ese período con otro método anticonceptivo, el adecuado para ese momento, claro”.
“Dar la teta, si hablamos desde el punto de vista de las ventajas para la mamá, ayuda a bajar de peso, y ni hablar del vínculo que establece con su hijo como una especie de continuidad de ese embarazo donde lo tuvo dentro de su cuerpo tantos meses. Además, cuando se está amamantando el útero vuelve más rápidamente a su forma habitual, las pérdidas se van espaciando o desaparecen, y se segrega dopamina, la llamada droga de la felicidad”, manifestó la obstetra Chiapani.
“En el curso de Preparto que se da los lunes acá en el Hospital, también hablamos de lactancia, cómo poner el bebé al pecho, como lograr una lactancia provechosa. Cuando nace el bebé, vamos a la habitación permanentemente, no es que ella queda sola, hacemos los controles, la acompañamos, y luego de que deja el Hospital también insistimos en que traiga al bebé para seguir supervisando el crecimiento y aclarando dudas”, cerró la obstetra Cresimati.